2014 está siendo sin duda el año de las SOCIMIs. Este nuevo formato aprobado por el Gobierno no cabe duda de que ha conseguido revitalizar el movimiento en el mercado inmobiliario. Se suceden el número de SOCIMIs que están empezando a cotizar en bolsa. Inversores nacionales y extranjeros, muchos de ellos de prestigio, han respaldado la iniciativa.
LAR Real Estate, la primera en debutar en el parqué madrileño, fue lanzada de de forma discreta, sin publicidad notoria. Si a ello sumamos el desconocimiento de muchos inversores minoritarios, centrados ahora en la recuperación de otros valores como los del sector bancario, se puede entender que su cotización se mantenga por debajo de los 10 euros, valor de salida de la OPV.
Pero hay más razones, LAR está teniendo paciencia y no está haciendo grandes movimientos, digamos que se está tomando su tiempo para construir su conjunto de inmuebles a gestionar, lo cual es por supuesto una muestra de buena gestión, pero por otro lado la mantiene en el anonimato del mundo inversor.
Por último, la avalancha de OPVs por parte de todas las SOCIMIs que están creando los distintos grupos inversores suponen un nuevo mercado con opciones varias en el que es lógico que se estudien las propuestas antes de decidirse por una u otra, o diversificar entre ellas.
Por tanto, seguimiento y paciencia. Las SOCIMIs en general y LAR en concreto, necesitan tiempo para empezar a dar alegrías a sus accionistas.